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TogglePara nadie es un secreto que la escalabilidad, la seguridad y la descentralización son tres aspectos que relucen por su cuenta dentro de la tecnología blockchain. Por supuesto, esto se debe a lo necesarios que son estos pilares para construir un ecosistema sano.
En consecuencia, existen muchos proyectos que se enfocan en mejorar este tipo de aspectos, más que por otros que pueden llamar más la atención como la realidad virtual, los memes de perros o los NFT.
Inclusive, estos 3, son pilares tan esenciales que proyectos enormes como Ethereum, ejecutan cambios como el EIP 1559 con el fin de de seguir mejorando en esas cuestiones.
Ahora, ¿Qué pasaría si te dijera que hay un proyecto de tercera generación que está centrado en esto y está enloqueciendo a los usuarios por su eficiencia?
Es absolutamente interesante ¿no?, pero a eso súmale que se ha posicionado dentro de los 50 proyectos con mayor capitalización de mercado y lleva muy pocos años desde su lanzamiento.
Hoy te damos la bienvenida a una nueva galaxia: Algorand (ALGO), el proyecto que amenaza la supremacía de Ethereum en la industria de las DeFi y DApps.
Como hemos dicho, Algorand es una blockchain de código abierto que tiene como objetivo resolver los tres problemas principales que enfrentan las cadenas en la actualidad:
Para este fin, aprovecha una estructura de dos capas y una variación única del algoritmo Proof of Stake, llamada Pure PoS. Gracias a esto, asegura que se procesan y completan transacciones con mayor rapidez.
Igualmente, busca eliminar intermediarios, reducir las tarifas y eliminar retrasos. En general, se orienta a mejorar los procesos que hacen que los sistemas financieros sean molestos.
Así mismo, se dirige a transformarse en una blockchain pública y permisionless. Es decir, que cualquier usuario sin necesidad de tener un pc de alta capacidad, puede utilizarlo.
Sus raíces se remontan a 2017 cuando el científico informático del MIT y ganador del premio Turing, Silvio Micali, desarrolló esta red blockchain a través de la fundación Algorand.
Silvio Micali, es un especialista de la criptografía, ya que ha sido parte de la comunidad de criptógrafos desde 1980. Además, es co-creador de las pruebas de conocimiento cero (ZKP).
Siempre ha sido un investigador y, cuando conoció Bitcoin y la tecnología blockchain, comenzó a interesarse más por la misma.
Después de ello, comenzó a trabajar en un proyecto personal que pretendía mejorar algunos factores de Bitcoin y Ethereum.
Por esta razón, se asoció con Nickolai Zeldavich, un colega del MIT que participaba en Computer Science and Artificial Intelligence Laboratory (CSAIL).
Con su ayuda, realizaron un experimento a gran escala para probar la idea de Micali, para la cual utilizaron los servidores de Amazon.
Desde entonces, conformó su equipo multidisciplinario para crear Algorand, en donde se hallan investigadores, criptógrafos, matemáticos y desarrolladores. Finalmente, en 2019, lanzaron Algorand.
El protocolo de consenso de Algorand, Pure Proof of Stake, no utiliza delegados centralizados de comités fijos para validar bloques, por lo que se considera pura.
En términos sencillos, el siguiente proceso sucede para verificar una transacción:
Después de todo, cada usuario recibe una cantidad de recompensa proporcional a su participación por bloque.
El proceso de selección lo hacen de forma aleatoria para que nada pueda saber quién conformará el próximo comité.
Lo anterior, en vista de que malos actores podrían influir en los futuros miembros del comité.
Para esta finalidad, utiliza una herramienta de aleatorización criptográfica personalizada llamada “función aleatoria verificable” o VRF.
Con la VRF, no hay ninguna autoridad que seleccione a los participantes.
Como mencionamos, tiene una estructura de dos capas.
El algoritmo Pure PoS de esta red descentralizada, necesita de un orden específico para su funcionamiento, por lo que tiene dos tipos de nodo.
ALGO es el token nativo de la blockchain de Algorand. Es una de las monedas digitales más rápidas, seguras y confiables que se utilizan en la actualidad y que fortalecen la visión de una economía sin fronteras.
Al iniciar el proyecto, se realizó una oferta inicial de monedas (ICO) y el proyecto recaudó aproximadamente 60 millones de dólares.
Indudablemente, su uso principal es para pagar tarifas dentro de la red. No obstante, también se usa como:
Posee un suministro de 10 mil millones de tokens que están planeados para ser distribuidos por 10 años y pueden adquirirse en plataformas de intercambio.
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