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ToggleAlgunos Bancos Centrales han comenzado a analizar el potencial de emitir su propia moneda virtual, y tal como contamos en artículos anteriores están cada vez más cerca de hacerlo. Pero más allá de las noticias, o los rumores es bueno conocer más a fondo de qué hablamos cuando hablamos de CBDC o Central Bank Digital Currency (Monedas Digitales del Banco Central).
En este breve artículo responderemos preguntas frecuentes como ¿Qué es una CBDC?, ¿Cuáles son las características de una CBDC? o ¿Cómo funcionan las CBDCs?, entre otros datos de interés.
Las siglas CBDC se refieren a Central Bank Digital Currency o, en español, Moneda Digital de Banco Central. Esta moneda virtual es una manera de emitir dinero fiduciario digital por parte de un banco central, para una determinada nación y en un determinado territorio.
De alguna manera, la estrategia detrás de esto es darle una nueva cara al dinero fiduciario que todos conocemos pero sumándole algunas características que tienen las criptomonedas.
Decimos “algunas” porque claramente un dinero comandado por un banco central carece de los beneficios básicos de una criptomoneda con respecto a la privacidad y la descentralización.
Vale aclarar que las CBDCs no son criptomonedas como Bitcoin, Ethereum, etc. sino una simple reacción de los gobiernos e instituciones financieras ante el crecimiento y la “amenaza” de las criptomonedas.
¿Por qué los bancos y los gobiernos están preocupados? Porque están perdiendo poder económico y financiero en manos de monedas libres que compiten contra el monopolio del dinero ejecutado por los bancos centrales en cada país.
El acceso a la información, potenciado por internet, deja cada vez más en evidencia que este monopolio descarado del sistema financiero ha llevado a muchos países a la ruina.
Conscientes de que su negocio va en declive, los gobiernos están impulsando una forma de dinero que les ayude a alcanzar diferentes metas económicas, políticas, geoeconómicas y geopolíticas y dónde el espionaje a la población alcanzará niveles nunca antes vistos.
Entre esos casos, ya hemos repasado las propuestas de China con el Renminbi electrónico o las de la Unión Europea con el Euro Digital. A pesar de que las diferencias de objetivos varían de unos estados a otros, en líneas generales las razones para implementar una CBDC son:
– Crear una nueva forma de dinero que pueda aprovechar toda la tecnología que han desarrollado las criptomonedas hasta este momento.
– Impulsar nuevas estructuras económicas y del sistema financiero que fomenten la inversión de las naciones y el mundo.
– Mejorar y simplificar el comercio nacional e internacional.
– Estimular la competencia entre diversos servicios de pagos, haciendo que estos sean más económicos y mejoren el alcance.
– Desarrollar mecanismos de control veloz e inmediato sobre la política monetaria.
– Crear una estructura de control que permita saber cuál es el curso del dinero desde el origen hasta el final en todo momento.
– Reemplazar el anonimato del dinero por el control de parte de las instituciones financieras que controlan las CBDCs.
La manera de funcionar de una CBDC depende de la tecnología y los propósitos por los que fue creada dicha moneda. Tal como las criptomonedas, cada una puede tener una tecnología y un funcionamiento diferente. En este caso, dependerá de los intereses del Banco Central que la emita.
Como hemos visto muchos de estos Bancos Centrales han puesto los ojos sobre la tecnología blockchain y los libros contables distribuidos. La razón es que esta tecnología facilita la creación de sistemas interoperables con otras monedas, como lo vemos con las criptomonedas en la actualidad. Al mismo tiempo permite al emisor hacerse de una base de datos gigantesca.
También, las CBDCs podrían tendrían la posibilidad de implementar tecnologías como los smart contracts, impensadas en el dinero fiduciario actual.
En la imagen superior podemos ver diferentes funcionamientos de las CBDC dependiendo los objetivos que persiga dicha moneda.
1- Mejorar el funcionamiento de los servicios de pago al por mayor.
2- Sustituir los billetes y monedas físicas por una alternativa más eficiente. Tanto para el sistema financiero como a las entidades de pago.
3- Mejorar los instrumentos disponibles de política monetaria, especialmente cuando se enfrentan al límite inferior de cero
4- Mayor estabilidad financiera reduciendo la frecuencia y el coste de las crisis bancarias.
Cada uno de ellos, caso genera (en colores gris) distintas áreas donde las CBDC son posibles, cada una de ellas con características propias.
Sea cual sea el caso, es evidente que los objetivos que los proveedores de servicios financieros y el Estado se propongan, van a definir la forma en cómo funcionará una CBDC y qué características tendrá esta en determinados momentos.
Para que entiendas cuáles son las diferencias principales entre tener una CBDC o comprar bitcoin haremos una breve comparativa:
Política Monetaria
– En Bitcoin serán creados sólo 21M de Bitcoin y esto no se puede cambiar.
– En las CBDCs esto quedará en manos de la entidad emisora por lo que sin dudas serán susceptibles de inflación.
Geografía
– BTC es accesible a todo el mundo sin límites de fronteras.
– Una CBDC estará limitada al territorio que el gobierno emisor determine.
Almacenamiento
– En Bitcoin cualquiera puede recibir y guardar Bitcoins con su propia semilla de seguridad.
– En una CBDC los usuarios pueden estar expuestos a la censura si no cumplen con los requisitos requeridos.
Transferencia
– En BTC cualquiera puede transferir valor mientras tenga internet y su clave privada.
– En las Monedas del Banco Central dependerá de los requisitos que impongan los bancos centrales
La síntesis de la creación de las CBDCs puede resumirse en la frase “Ladran Sancho, señal que cabalgamos”.
Los Bancos Centrales intentarán limitar coercitivamente el uso de las criptomonedas imponiendo (como puedan) el uso de una moneda digital propia.
¿Lograrán detener o pausar el avance de las criptomonedas? Mi opinión personal es que no tienen posibilidad alguna.